Atrás quedaron los días en los que por primera vez veía a 2 Minutos el año 98' en alguno de los tantos "Resistencia Mapuche".
No recuerdo bien, pero coincidía con la primera copia del cassette Valentín Alsina que llegaba a mis manos vía un buen amigo del Bío Bío meses atrás.
Lejos quedarían las veces que Walter "Mosca" Velásquez y compañía tocaban hasta que los echaran del recinto en el entonces llamado Teatro Monumental, casi acapela y con un público enfervorizado. Otra ocasión me remonta a un vocalista enyesado en toda su parte superior y en boxers en medio del escenario.
La última vez que tuve la posibilidad de verlos fue en un Galpón de Chucre Manzur -cerca del desaparecido canal Rock and Pop-. Casi 10 años después, nuevamente por cosas del destino, estaba ahí viendo a la agrupación trasandina en vivo, en un Teatro Novedades que de la mitad hacia atrás poco y nada se entiende.
Si bien las generaciones cambian, los integrantes cambian, pero 2 Minutos fueron y serán, para más de alguno: una buena dosis de nostalgia.
La tarde del 3 de Noviembre ejecutaron un concierto como los de antaño, en el que repasaron lo mejor de su discografía, en donde justificaron el por qué han permanecido durante más de 20 años haciendo punk rock. Nihilismo Innecesario estuvo ahí: acá va el reporte.
La Choclo..¿qué?
La Chocloneta, "¿quienes son?" Fue una de las preguntas que al menos respondí durante un par de ocasiones en la tarde. La verdad es que para ser sincero ni yo sabía muy bien que esperar de esta agrupación. Lo cierto es que para no crearme falsas expectativas sólo llegué al concierto a verlos y hacerme una opinión acerca de ellos remitiéndome a su música, ya que es de esos grupos que hay que prestar atencion a cada detalle.
La banda ya viene haciendo ruido desde el 2000, en una fusión que mezcla los sonidos del punk más duro con el metal, percusiones que otorgan un claro espíritu latino y una clara pasión por la raza, nos llevan en el imaginario colectivo a un eterno ritual que un vocalista sin polera y descalzo se encargo de esparcir a lo largo de sus 25 minutos de actuación.
Cuerdas con distorsión y una potente y frenética base de percusión pareciera despertar a los primates, claros reivindicadores de la autonomía y una contundente visión latina en cada letra.
Creo que fueron los mejores parados y que dejaron un mejor sabor de boca a los asistentes pese a su desconocimiento, sin tratar de ajustarse a alguna fórmula conocida, la vorágine de sonidos los transforman en una máquina que arrasa.
Iniciarion los fuegos con "Mira a tú alrededor", para seguir con un juego de voces en "Gallinazo" y "La Marka". Una de las mas celebradas fue "Mapu" - tierra-, ocasión en la que el vocalista, toma una "trutruca" para dar inicio a una sólida interpretación, mezcla de tozudez y actitud - o como quieran llamarle-.
Incluso se dieron el lujo de incluir una estrofa de 2 Minutos en una de sus canciones: "Demasiado tarde". Finalizaron su presentación con "Eleva tu frente".
En general, fue una buena noche para la agrupacion. La gente supo apreciar el trabajo e ímpetu del grupo por hacer cosas distintas. Como en este caso, a veces las buenas ideas sobran.
Del punk al blues
Liderados por "El Trankilo Krezta" (ETK), la agrupacion de "rockabilly" subía a escena con igual o más personalidad que sus predecedores. Tienen chispa y son crudos, si a esto le sumamos las ganas que posee la agrupacion de transmitir sus historias de humor e ironía en torno a las mujeres, el rock and roll y la cotidianeidad por la que se pasean tenemos a Tios Bizarros.
Por más de tratar de encasillarlos como revisionistas de tal o cual estilo musical, lo cierto es que vienen a mancharlo todo de humor negro, una puesta en escena que no deja indiferente a nadie, ya sea por la simple belleza de "Carolaviudadelvis", muy ad hok con el estilo folk de PauloTB en la guitarra, ambos vestidos de vaqueros.
ETK no para de un lado al otro del escenario. "Nalgaroll", "Dosis de Rock and Roll" "Menea el kulito" fueron algunas canciones con las que hicieron que el público siguiera subiendo en adrenalina, pese a los cánticos en alución a 2 Minutos, que comenzaban a resonar en el ambiente.
La banda representa una mezcla rara y variada de estilos y tendencias, que van desde el rock and roll más puro hasta el punk rock, pasando por toques blues, que evocan los clásicos sonidos de Nashville. Tíos Bizarros se divierte en escena y lo trasmiten. Más de 10 años de rock and roll no pasan en vano y lo dejaron más que claro en inteligencia y originalidad.
Actitud punk independiente
Formados en el ocaso de los noventa, la Mosca Travesti no se ha ido por el camino fácil. Tiene una premisa clara en sus letras, con una critica dura al sistema que conviene recordar y repetir.
En los cerca de 25 minutos de set fueron el epítome musical de aquello, una actitud punk e independiente que más de alguno hoy en día se la querría.
Pese al corto tiempo repasaron su repertorio mas conocido, temas como "Artureando", "Polilla" fueron algunos, dandose el gusto de despotricar en contra de Zalaquett, haciendo clara alusión de quien quiere cerrar todo Santiago de noche es un "conchesumadre". Así lo decía Marcelo "Coloro" respaldado por la gente.
Herederos de un mensaje honesto, sencillo, pero necesario y trascendental, demuestran que el tiempo pasa pero los problemas son los mismos.
Una divertida muestra de como saber articular a estos nuevos -viejos- heroes locales.
Volvió la alegría, vieja...
Ya aparecían los primeros lienzos de 2 Minutos y si tuviera que definirlos diría que son cánticos para corear en un espirítu de total fiesta y energia: la banda sonora de toda una vida mezclada en una juguera.
El primero y más ansioso en subir a escena parecía ser el hiperquinético el guitarrista Pablo Coll, quien entró con una máscara contando chistes de "gallegos" y de paso tomaría gran importancia en animar a la gente frente a un estatico Marcelo "Pedro" Pedrozo a la Guitarra y Bajista, mientras el resto de la agrupación tranquilamente tomaba cada uno de sus instrumentos para dar inicio al punk rock directo con todos los ingredientes que Mosca y compañia saben hacer en estos años de maestría de punk rock trasandino.
Y fue cierto. No era más que sonaran los primeros acordes de Valentin Alsina para que la fiesta se desatara completamente.
"Canción para mi muerte", "Ezeiza" y uno a uno volvían a los clásicos.
Sonaron por los parlantes "Otra vez", al mismo tiempo que el público no paraba de lanzarse sobre las cabezas de los asistentes para "no" ser recibidos por lo guardias, cosa que en más de algún momento provocó caídas dignas de ser recordadas, al menos por los que las vivieron.
"Pelea Callejera", "Amor suicida" y "Mala suerte" golpeaban las caras de los espectadores. Una tras otra. En esta última Mosca y Pablo, en su particular estilo, se hacían cargo del escenario.
El hecho de que cada canción no supere los "2 minutos" esta vez fue favorable, ya que alcanzaron a mostrar gran parte de su repertorio. Sin lugar a dudas algo siempre acertado de la banda es tocar un clásico tras otro dejando apenas espacios entre canción y canción para retomar aire.
¡Barricada!
Mientras un chico regalaba la mascara de "Jason" a Pablo, que provocó que Mosca dijera, envidioso, "uh que buen regalo rescastaste, ché", comenzó a sonar Barricada Policial, canción que el mismo tipo pedía insistentemente al principio del recital.
A mitad del concierto, mientras ya ejecutaban "Arrebato", uno de los fanáticos que volaba por la cabeza de los asistentes cayo sin ser recibido en el foso. Ahí el concierto se detuvo por algunos minutos. La mayoría de la gente, tanto de la agrupacion como asistentes, fueron a prestarle ayuda al chico que más que el golpe eran unos grados etílicos los que le habían pasado la cuenta. Para retomar nuevamente la canción que había quedado inconclusa.
"Es una nena y la estan sintonizando", bromeaba Pablo, mientras hacia un gesto a modo de cambiar perillas de una radio riendo y bajando el perfil a los minutos de preocupación, hasta que el chico se puso de pie. Momento que indicado para tocar un tema del proximo disco en estudio de "Vamos a la granja, directo al infierno".
Finalizaban el tema y Mosca tomaba aire, mientras los "Apóstoles de la Distorción". Ambos guitarristas, Pablo Coll y Marcelo Pedroso, quienes entraron en la agrupación el año 99, se apoderaban del escenario para interpretar "La ladrona" y "Casa de dos".
Por si esto fuera poco, la segunda parte y final se remitió a los ya clásicos de la banda como "Tema de Adrián", "Todo lo miro", "Cancion de amor", "No me molesten" y "Ya no sos igual", dedicada a los policías que solían ser del barrio. Clásico tema y quizás más versionado junto con alguno de "La Polla" en las multicanchas de antaño.
También tocaron "Caramelo de limón", el lindo cover de amor reversionado a la manera 2 Minutos, al mismo tiempo que entre el público las bengalas inundaban de fiesta como antaño hicieran en el Monumental.
"Este tema es para todos los chicos y chicas que ya no están y dice así...1,2,3, va", decía Mosca en "El mejor Recuerdo". De ahí vino "Aquaman" y el momento en que Pablo se ponía la máscara de Jason regalada por el chico del público e iniciaban "Jason", para dar paso al cover de Misfits "I turned into a martian", donde Coloro de La Mosca Travesti se sumaba a los coros.
Como todo llega a su fin, la agrupación tras interpretar "Aeropuerto", "Otra mujer" y "Piñas van piñas vienen", un clásico dedicado a todos los boxeadores argentinos del "Volvio la alegría, vieja!!!", en una hora y media de concierto se aprestaban para retirarse con "2 Minutos".
Junto a Federico, su asistente a la guitarra, cerraban una maratonica jornada que incluyó de todo: un recambio por sobre todo generacional importante, que aún disfruta del punk de los oriundos de "Valentín Alsina", cerca de 400 asistentes disfrutaron de una noche llena de nostalgia, pogos, amor y stages en los que a mi particularmente me remontaron a mis años de escuela y fiesta- y bueno como diria Mosca-, a mas de alguna también.
Quizás el hecho de escuchar una y otra vez los clásicos de ayer y hoy le reste importancia a sus nuevos trabajos. ¿Ejemplos? temas como "2x10", "Cero", "Piedras Rodantes" -cover de El TRI- o el mismo "Metal Marciano Rojo", aún así a mi parecer lo de esta noche, es lo que la gente quería esuchar.
Ve las imágenes completas haciendo click sobre ellas.
Videos:
Bonus: La banda tocó el día jueves en un Óxido Bar lleno, para terminar la noche tocando en un Club Babylon desde las 12 de la noche hasta las 4 de la madrugada con Pablo a las voces y sin un Mosca cantando por razones ¿etílicas? no sé probablemente ¿cansancio? el que asistió sabrá de que hablo.
Texto y fotos: Sergio Sandoval
Edición: Nihilismo Innecesario
