“A las Barricadas”, “Cualquier Noche Puede Salir el Sol”, “Los Olvidados”, “Los Pobres No Tienen Patria”, “La Gran Estafa del Rock´n´Roll”,”Rapsodia Libertaria I y II” son títulos que forman una imagen del grupo inmediatamente: Los Muertos de Cristo.
Agrupación de amplia trayectoria, con casi 20 años a sus espaldas y quienes lanzaron a finales del año pasado su ultimo trabajo, “Rapsodia Libertaria III, El Último Galope”.
Lo he escuchado y re-escuchado para lograr sentarme a escribir una digna y justa crítica con respecto a este trabajo del grupo español.
Por José Peiret
En sus dos visitas a Chile se formó un cierto escenario con respecto a Lorenzo, que tal vez rayaron a un decepción política, pero en lo netamente musical el grupo jamás a decepcionado con sus temas.
R.L.III (Rapsodia Libertaria III) consta de dos cds grabados en vivo, el primero en la Sala “El Grito” en Madrid y el segundo en ambos conciertos en Chile (Estadio Víctor Jara y Court Central), además de un libro con fotografías de la gira, algo que no comentaré ya que descargo la música en páginas de dudosa reputación, como casi todo el mundo.
El sonido del primer CD es realmente increíble. A pesar de estar grabado en vivo, no se pierde ni un detalle de la fuerza con que se vivió en aquel concierto. Las canciones que se eligieron son bastantes representativas, aunque faltó “Muerte accidental de un Anarquista”.
Una introducción precisa y corta nos adentra en el mundo “libertario” quien nos recibe con el irreverente “Aleluya Gloria al Señor”, canción rápida y poderosa que prende a todo aquel que esté escuchando el disco. Uno de los himnos de la agrupación se asoma rápidamente en este terreno musical, “Ni dios Ni amo”, que es coreado por el público presente y por el auditor, que siente de verdad aquellas palabras, ya que es casi irresistible no prender con el grito de: “ni dios, ni dios, ni aaaamo”.
Luego, el CD mantiene el camino prendido y el ambiente para el mosh con la “Danza de los Malditos”, “Los pobres No tienen Patria”, donde Lorenzo con sus gritos “superdecibelicos” anima a la gente a cantar; ésta, termina con el himno “A la barricadas” cantado por el público, lo que causa un alto en el terreno libertario, para recobrar el aliento bajo gritos de libertad.
"¡¡¡¡Qué te pasa Manuel!!!..." es el grito con que uno despierta en “Lagrimas de Sangre”, tema que tocan a la perfección, hasta con su ska incluido y sus bases del propio vocalista. Sin embargo, la ejecución del punteo deja que desear. Al parecer el guitarrista no estaba muy inspirado en aquel momento, a pesar de que la participación del público es perfecta por lo que se escucha.
“Por Quien doblan las Campanas”, al igual que la novela de Ernest Hemingway, sale a flote con la fuerza del público y del vocalista, quienes recuerdas bajo sus letras la guerra civil española y que termina con el grito de Lorenzo: "¡Que no se acabe la fiesta!".
El piano luego hace su entrada con la centenaria melodía de “Para Elisa”, donde se extraña en el coro las voces femeninas, pero de igual forma impacta la historia de los inmigrantes de todos los lugares.
Inmediatamente comienza una de las canciones que más me gusta: “Corazón Indomable”, generándose una interacción entre el público y LMDC. Aquí la voz de Lorenzo no es muy afinada que digamos, y no es que es que sea afinado en su totalidad, pero se notan algunas “pifias”. “Viva Durruti gritaban los obreros”, repiten los afortunados espectadores, quienes además llevan el pulso del coro final.
"Orgullo", palabra que Lorenzo enfatiza en su discurso, ya que LMDC desde 1989 han creado diferentes obras y canciones que han inspirados a diferentes jóvenes. “Hagamos que los sueños se conviertan en realidad, que la lucha no decaiga hasta conseguir que: ¡Cualquier noche puede salir el sol!”. Así da pie a uno de los últimos temas, emotivo y participativo totalmente con los espectadores.
“Obreros somos”, punto final del disco, tema cantado casi todo por el público presente y con la voz desenfrenada en el mosh de Lorenzo como fondo de un himno de todo trabajador. El final del disco nº 1 se cierra con el tema “The End”, donde presenta a todos los integrantes de la banda. Un momento latero dentro del disco, pero necesario de un concierto. Luego de aquel episodio, llega el “ya nos vamos”, tema con que termina el R.L.II y repiten en esta oportunidad.
En resumen, en este primer disco se encuentran los mejores temas del grupo español, con muy buen audio y una atmósfera parecida a la que se vivió en los conciertos en Chile y que se escuchará en el siguiente disco. Quizás en algunos temas distrae la perdida de sonido cuando canta el público, pero es propio de un CD en vivo.
Agrupación de amplia trayectoria, con casi 20 años a sus espaldas y quienes lanzaron a finales del año pasado su ultimo trabajo, “Rapsodia Libertaria III, El Último Galope”.
Lo he escuchado y re-escuchado para lograr sentarme a escribir una digna y justa crítica con respecto a este trabajo del grupo español.
Por José Peiret
En sus dos visitas a Chile se formó un cierto escenario con respecto a Lorenzo, que tal vez rayaron a un decepción política, pero en lo netamente musical el grupo jamás a decepcionado con sus temas.
R.L.III (Rapsodia Libertaria III) consta de dos cds grabados en vivo, el primero en la Sala “El Grito” en Madrid y el segundo en ambos conciertos en Chile (Estadio Víctor Jara y Court Central), además de un libro con fotografías de la gira, algo que no comentaré ya que descargo la música en páginas de dudosa reputación, como casi todo el mundo.
El sonido del primer CD es realmente increíble. A pesar de estar grabado en vivo, no se pierde ni un detalle de la fuerza con que se vivió en aquel concierto. Las canciones que se eligieron son bastantes representativas, aunque faltó “Muerte accidental de un Anarquista”.
Una introducción precisa y corta nos adentra en el mundo “libertario” quien nos recibe con el irreverente “Aleluya Gloria al Señor”, canción rápida y poderosa que prende a todo aquel que esté escuchando el disco. Uno de los himnos de la agrupación se asoma rápidamente en este terreno musical, “Ni dios Ni amo”, que es coreado por el público presente y por el auditor, que siente de verdad aquellas palabras, ya que es casi irresistible no prender con el grito de: “ni dios, ni dios, ni aaaamo”.
Luego, el CD mantiene el camino prendido y el ambiente para el mosh con la “Danza de los Malditos”, “Los pobres No tienen Patria”, donde Lorenzo con sus gritos “superdecibelicos” anima a la gente a cantar; ésta, termina con el himno “A la barricadas” cantado por el público, lo que causa un alto en el terreno libertario, para recobrar el aliento bajo gritos de libertad.
"¡¡¡¡Qué te pasa Manuel!!!..." es el grito con que uno despierta en “Lagrimas de Sangre”, tema que tocan a la perfección, hasta con su ska incluido y sus bases del propio vocalista. Sin embargo, la ejecución del punteo deja que desear. Al parecer el guitarrista no estaba muy inspirado en aquel momento, a pesar de que la participación del público es perfecta por lo que se escucha.
“Por Quien doblan las Campanas”, al igual que la novela de Ernest Hemingway, sale a flote con la fuerza del público y del vocalista, quienes recuerdas bajo sus letras la guerra civil española y que termina con el grito de Lorenzo: "¡Que no se acabe la fiesta!".
El piano luego hace su entrada con la centenaria melodía de “Para Elisa”, donde se extraña en el coro las voces femeninas, pero de igual forma impacta la historia de los inmigrantes de todos los lugares.
Inmediatamente comienza una de las canciones que más me gusta: “Corazón Indomable”, generándose una interacción entre el público y LMDC. Aquí la voz de Lorenzo no es muy afinada que digamos, y no es que es que sea afinado en su totalidad, pero se notan algunas “pifias”. “Viva Durruti gritaban los obreros”, repiten los afortunados espectadores, quienes además llevan el pulso del coro final.
"Orgullo", palabra que Lorenzo enfatiza en su discurso, ya que LMDC desde 1989 han creado diferentes obras y canciones que han inspirados a diferentes jóvenes. “Hagamos que los sueños se conviertan en realidad, que la lucha no decaiga hasta conseguir que: ¡Cualquier noche puede salir el sol!”. Así da pie a uno de los últimos temas, emotivo y participativo totalmente con los espectadores.
“Obreros somos”, punto final del disco, tema cantado casi todo por el público presente y con la voz desenfrenada en el mosh de Lorenzo como fondo de un himno de todo trabajador. El final del disco nº 1 se cierra con el tema “The End”, donde presenta a todos los integrantes de la banda. Un momento latero dentro del disco, pero necesario de un concierto. Luego de aquel episodio, llega el “ya nos vamos”, tema con que termina el R.L.II y repiten en esta oportunidad.
En resumen, en este primer disco se encuentran los mejores temas del grupo español, con muy buen audio y una atmósfera parecida a la que se vivió en los conciertos en Chile y que se escuchará en el siguiente disco. Quizás en algunos temas distrae la perdida de sonido cuando canta el público, pero es propio de un CD en vivo.