¿Y qué tiene que ver?
No hay futuro, no hay esperanza, ¡Venganza!
La Polla Records
(Por Simón Ramone)
Y cancelaron Ratos de Porao. ¿Tiene alguna relevancia hacer un análisis al respecto? Está claro, no. Por eso, escribamos. Descubramos palabras, intentando encontrar alguna respuesta.
¿Qué hace que todos los grupos Punk cancelen en Chile? ¿Tenemos alguna especie de maldición? Puede ser, pero no tiene sentido. Pensemos en el año pasado: Soziedad Alkoholika en Chile. Sí, suena imponente, casi orgásmico. La leyenda del Punk, hXc, del rock radical vasco (como quieran llamarle) debía visitar Chile. ¿Visitó Chile? No. Existen muchas hipótesis, pero la más sólida es que el público no está comprando entradas. Puede sonar razonable, porque:
1) Pagar entradas no es digno de un Punk. Un Punk no compra entradas, un Punk entra a los conciertos sin dar mayores explicaciones
2) Un Punk homologa lo político con su espacio cultural (Por ejemplo, entrar sin pagar a un concierto de Misfits, padres de las letras terroríficas con un macabro mensaje de fondo, es un acto político)
Pero volvamos a Ratos de Porao. Esta vez no fue por la estupidez humana la ausencia de la banda, sino por una clara ineptitud de los organizadores. Pero admitámoslo, esa ineptitud no salió de la nada. La ausencia de locales siempre va a condicionar este tipo de actitudes.
Tratemos de pensar un poco. El Punk nunca fue un movimiento de algo, pero ingeniosos reyes del marketing supieron vender ese discurso. Por años se engañó a los niños con poleras agresivas, con canciones ácratas y nihilistas. La explosión espontánea era un asunto de tiempo. ¿Explosión espontánea? Exacto, me refiero a la violencia actual sin mayores explicaciones. Esa violencia actual sin mayores explicaciones confirma la ausencia de locales. Hagamos un trabajo mental mínimo. Ponte en el lugar del Estadio Victor Jara.
Hola, soy el Estadio Víctor Jara, ¿cómo están estimados amigos punks?
- (Punks adolescentes) Cállate gil culiao, deja pasar
- (Estadio Víctor Jara) No entiendo amigos punks, ¿por qué esa actitud?
- (Punks adolescentes) Cállate gil culiao
(Todo esto termina en varios destrozos en un principio considerados como menores, llámese rotura de baños)
Eso ocurre, el Estadio Victor Jara ya no acepta que adolescentes, bajo el discurso de “Anarquía y Rebelión” , lo destruyan porque es un ejemplo concreto de rebeldía. Ejemplo concreto de rebeldía...suena hasta creíble.
Pero Simón, detente, ¿Qué tiene que ver esto con Ratos de Porao? ¿Qué tiene que ver el Estadio Victor Jara? Simple, es una pequeña muestra de que para la cultura actual, el Punk no compatibiliza con sus postulados. El Punk actual, no compatibiliza con nada.
Fernando de Reincidentes comentaba (pensando en su concierto del 2003 con serios incidentes), que no veía algo así desde lo primeros años del regreso de la democracia a España. Lo más probable es que tenga razón. ¿Razón? Sí, esta violencia no nace de la nada, son síntomas, síntomas que no pueden aislarse como simples actitudes de niños rebeldes incomprendidos. Todavía me acuerdo cuando Megavisión, canal fascista y reaccionario, se mostraba impactado ante las cajas de vino que se encontraban alrededor del Gimnasio San Miguel, después del último recital de Misfits. “Era algo impactante” (sentenciaba Pablo Millas).
Quizás la culpa de la violencia innecesaria, de la falta de locales y del nulo sentido crítico no la tengan estos jóvenes que siguen gritando “Venganza” sin mayores esperanzas en tiempos mejores. Quizás la culpa la tengas tú, que todavía eres incapaz de comprender que todo esto se sigue cayendo a pedazos. Ellos ya lo notaron, y tengo la convicción que el dolor de tal descubrimiento no es fácil de aguantar. ¿Fácil? Já!
